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Shiba Inu - La elegancia y carácter del pequeño gran perro japonés

Shiba Inu -  La elegancia y carácter del pequeño gran perro japonés

Lobo Azul |

El Shiba Inu es un perro pequeño, con las dimensiones ideales para convertirse en perro de compañía. Por eso, es uno de los animales más populares de Japón, en donde sus habitantes lo adoran.

  • Peso: de 9 a 15 kilos
  • Tipo de pelo: corto
  • Carácter: tímido e inteligente. Muy fiel
  • Salud: excelente, robusta
  • Esperanza de vida: entre 15 y 18 años

Orígenes

Estamos ante una de las razas más antiguas del mundo, la cual se originó hace ya unos 4.000 años en Asia Meridional. 

Las primeras noticias sobre este perro datan del año 2000 a. C. y provienen de lo que hoy es Japón, un lugar a donde llegó desde el Sur de China.

Durante siglos fue empleado en la caza, en la cual destacaba en todo tipo de terrenos. Así fue ejerciendo este oficio hasta el siglo XIX, cuando la caza pasó a ser un deporte y con la apertura de Japón al mundo llegaron las razas europeas.

Por suerte, gracias al trabajo de los cazadores y al de los intelectuales japoneses, se recuperó la raza, la cual pasó por otro momento crítico en la II Guerra Mundial.

En esta época pudieron salvar tres líneas de sangre: las San In Shiba, Mino Shiba y Shin Shu Shiba. A partir de ellas se pudo desarrollar el Shiba Inu que conocemos ahora.

Hay que decir que en su origen no se llamaba así, ya que el nombre de “shiba” no se usó hasta 1920. Ya en 1934 se confeccionó el estándar de la raza, que pasó a ser monumento natural del Japón.

Características principales

Si conocemos al Akita Inu, otro perro japonés, nos damos cuenta de que el Shiba Inu es muy similar, pero que estamos ante un perro más pequeño con el hocico más fino.

Su pecho es robusto y el pelo corto. Sus orejas triangulares le dan el aspecto característico a la raza, además de una expresión despierta, como si siempre estuviese atento a lo que le decimos.

El tamaño de los machos y de las hembras es muy similar, con unos 40 cm a la cruz en el caso de los primeros y unos 37 las segundas. El peso es de entre 11 y 15 kilos en los machos, mientras que las hembras suelen estar alrededor de los 9-13 kilogramos.

La cabeza es ancha y con el stop bien marcado. Los labios están unidos y ocultan una boca cuyos dientes cierran en tijera. Cuando miramos la cabeza, nos damos cuenta de que estamos ante un perro antiguo, muy cercano al lobo.

Todos los colores están aceptados, menos el blanco. Así, podemos ver perros de color fuego, rojo, crema, sésamo, sésamo rojo, rojo y fuego, etc. Eso sí, siempre deben tener zonas de pelo blanco en la mandíbula, el abdomen, el interior de la cola, las patas, las mejillas y el hocico.

Carácter del Shiba Inu

Posee un carácter que nos recuerda al de las personas de su lugar de origen, puesto que es muy independiente y silencioso, aunque esto nos será así todo el tiempo.

Suele vigilar la casa y si tiene jardín no parará de patrullar, avisando ante la presencia de personas ajenas u otros animales, pero sin agresividad.

Con sus cuidadores es cariñoso y leal, mientras que con los extraños marcará la distancia, como si no le interesaran nada.

Puede vivir con otros perros a pesar de que es algo nervioso, pero para ello hay que trabajar con él desde que es joven. Lo mejor es mezclarlo con todos los perros que nos sea posible cuando es un cachorro y así aprenderá a convivir con otros canes.

Su convivencia con los niños divide a los aficionados a la raza. Esto se debe a que se pone muy nervioso, así que hay que explicar a los niños cómo jugar con él y decirles que no es un juguete.

A su vez, el perro tiene que estar bien educado si queremos que esté con los más pequeños de la casa, evitando que pase tiempo con niños a los que no conoce, o al menos no sin vigilancia por nuestra parte.

Cuidados

Aunque el pelo del Shiba Inu es corto, nos va a dar algo de trabajo. Hay que cepillarlo un par de veces por semana, una frecuencia que hay que aumentar en época de muda.

Se mancha poco, ya que tiene unas costumbres de higiene muy similares a las de los gatos. Disfruta acicalándose y dejando que sus dueños lo peinen, por lo que suele estar muy limpio.

No hay que lavarlo demasiado, pues posee una capa de subpelo muy espesa que tiene una grasa natural. Esa grasa se encarga de protegerlo y si lo lavamos con frecuencia va a desaparecer.

Por eso, siempre se recomienda emplear un champú seco a no ser que esté muy sucio, más en invierno con la idea de que no permanezca mucho tiempo mojado.

Necesita hacer ejercicio dos o tres veces al día, pero sin forzarlo. Con unos 30 minutos cada vez será más que suficiente, de manera que puede vivir en un piso sin problemas siempre que podamos salir al parque.

Estamos ante una raza que no es una gran deportista y dado su tamaño, se adapta bien a viviendas pequeñas. En todas ellas, con independencia del tamaño, hay que poner a su disposición juguetes con la idea de que los muerda y se relaje.

Alimentación

La alimentación del Shiba Inu no requiere de unas necesidades especiales. Podemos adquirir un pienso para razas pequeñas o medianas, pero lo cierto es que ni siquiera hace falta.

Como siempre, lo mejor es optar por una alimentación de calidad, que puede ser húmeda, natural o seca. La más cómoda es la última, lo que todos conocemos como pienso.

Aquí, hay que escoger uno que sea premium, con ingredientes naturales, sin colorantes ni conservantes.

En el mercado hay muchas marcas, por lo que nos decantaremos por una que tenga una buena composición, con la carne como principal ingrediente. Mejor si no tiene cereales del tipo del trigo, el maíz o la soja.

Mientras no presente alergias o intolerancias, la fuente de proteínas nos es indiferente. Lo más usual es que los piensos empleen el pollo, pero ya los encontramos de cordero, ternera, pato e incluso de pescado y sin un solo gramo de carne.

Si tenemos dudas, lo mejor es consultar con el criador o con el veterinario, pues ambos profesionales nos van a poder recomendar piensos con los que el Shiba Inu estará en perfectas condiciones.

Para finalizar este apartado, y dado el tipo de subpelo que posee, puede ser una buena idea darle algún suplemento como el aceite de salmón o de hígado de bacalao, aunque lo cierto es que los piensos ya suelen venir con estos suplementos.

Salud del Shiba Inu

Al igual que sucede con los perros de este tipo, con orígenes antiguos y cuya genética ha sido poco manipulada, el Shiba Inu tiene muy buena salud.

A pesar de ello, no se libra de algunos problemas como las alergias. Tiende a ser alérgico al polvo, al polen, a las plantas y a los medicamentos, de manera que habrá que estar atentos en este aspecto.

La displasia de cadera y la luxación de rótula no le son ajenas

Aunque es un perro de tamaño pequeño, lo cierto es que hay ejemplares que sufren displasia de cadera. Es una enfermedad hereditaria que hace que la cabeza del fémur no se aloje bien en el hueco de la cadera.

Cuando los animales la padecen, cojean y experimentan dolor, que se puede eliminar con medicamentos o con una operación si la displasia es muy grave.

La luxación de rótula es una enfermedad asociada a las razas pequeñas. El hueso de la rodilla se desplaza de su sitio y el perro llega a no poder caminar. Por suerte, en los perros de pequeño tamaño el problema se suele solucionar sin cirugía.

Padece algunas enfermedades en los ojos

Los Shiba Inu son propensos a tener cataratas y también atrofia retiniana progresiva. Eso significa que habrá que llevarlo a revisiones veterinarias al menos un par de veces al año, pues así nos podemos adelantar al desarrollo de estas enfermedades.

Además, acumulan legañas en el lagrimal. Hay que retirarlas, puesto que no solo afean la expresión del perro, sino que se puede crear una especie de amalgama con las legañas y el pelo, la cual estará siempre húmeda y terminará por hacer una herida al lado del ojo.

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